MUITÚ

El Muitú (Crax fasciolata) pertenece a la familia Cracidae, que incluye a las pavas de monte y las charatas. Esta familia es considerada una de las familias más amenazadas de la región, teniendo casi la mitad de sus especies con algún grado de amenaza debido su susceptibilidad a la pérdida de hábitat y a la cacería.

Un ave amenazada en el país

El muitú se encuentra categorizado como “Vulnerable” a nivel global y como especie de "alta prioridad de conservación". En Argentina la especie se encuentra categorizada “En Peligro”, debido al nivel de reducción de sus poblaciones y de las áreas de ocupación, sumado a la continuidad de las amenazas hacia las mismas como la caza furtiva y la degradación o pérdida de hábitat por tala selectiva o alteraciones en los cursos de agua. Se estima que el número de individuos maduros no superaría los 2.500, y las poblaciones más viables se encuentran en los bosques en galería del este de Formosa y de manera aislada y escasa en el extremo noreste de Chaco, en la región del Chaco Húmedo. En el resto de su distribución histórica, en las provincias de Corrientes, Misiones y Santa Fe, se encuentra extinto.



Un rol ecológico importante

El muitú habita bosques y zonas aledañas, muchas veces en galería (asociados a riachos o ríos). Es una especie principalmente frugívora que se alimenta de frutos caídos, brotes y semillas, e incluso de flores e invertebrados. Como otros crácidos, el muitú tiene la capacidad de dispersar las semillas de árboles con frutos carnosos, especialmente aquellos de gran tamaño que no pueden ser ingeridos por otras aves o mamíferos, y son predadoras de semillas duras por la acción digestiva de sus estómagos. Es por ello, que cumple un rol ecológico clave en el mantenimiento de las funciones ecológicas y la biodiversidad de los bosques que habitan, pudiendo intervenir en procesos de regeneración y restauración de los bosques.



Registros de la especie en Iberá

Existen evidencias de que la especie habitó el norte de la provincia de Corrientes. Los últimos registros datan de unos 30 a 40 años atrás y se ubican a lo largo del río Paraná (cerca de la localidad de Ituzaingó, en la zona de la represa Yacyretá y en el norte de los Esteros del Iberá (en cercanías de Villa Olivari). Si bien no se cuenta con registros más al sur de la provincia, es probable que la especie haya habitado otros sectores del Iberá y del Aguapey, que cuentan con ambientes similares de bosques secos estacionales neotropicales, aptos para el desarrollo de la especie.


La oportunidad de recuperar uno de los grandes dispersores en el Iberá

Tanto por su estado de conservación como por su rol en los ecosistemas en los que habita, nos planteamos el inicio de la reintroducción experimental de muitú dentro del Parque Iberá. La recuperación de esta ave no sólo permitiría aumentar el número poblacional de una especie que se ha perdido en gran parte de su distribución original, sino que permitiría recuperar su rol como regenerador de bosques mediante la dispersión y control de semillas de gran porte. Sumado al efecto ecológico de restaurar el muitú en el ecosistema, la reintroducción de esta especie representaría otro recurso importante para la producción de naturaleza que se viene desarrollando en la región, basada en el ecoturismo y el avistaje de fauna.

El primer sitio de liberación elegido es la reserva privada de CLT Rincón del Socorro. Los sectores boscosos de la misma han comenzado un notable proceso de recuperación gracias a la exclusión ganadera y a la supresión de fuegos frecuentes. Esta reserva resguarda la mayor superficie de bosques en categoría de conservación estricta de la Reserva Provincial Iberá, y es lindante con el extenso Parque Provincial Iberá, también con categoría de conservación estricta. Debido a las condiciones favorables para la especie en la zona en cuanto a disponibilidad de ambientes y ausencia de amenazas, se considera que la Reserva Rincón del Socorro tendría un alto potencial como sitio para iniciar el proyecto experimental de reintroducción de muitú en Iberá.